Yo siempre he sido un anti motos. Nunca he querido subirme a una y además les he tenido bastante miedo. No creais que ha sido un capricho de unos pocos días, sino que ha sido así toda mi vida.
Pues ahora, a los 35 tacos, he decidido que quería comprarme una moto.
Hace dos sabados fui a verla, el sábado pasado a probarla y mañana a recogerla.
Aunque le tengo un poco de respeto, espero que conduciendo con tranquilidad y confiando en la buena conciencia de los conductores no tenga ningún incidente.
Creo que me va a dar una gran libertad para ir a trabajar y para ir con mi mujer a la playa en verano sin preocuparnos de no encontrar sitio para aparcar.
Por cierto, la moto que me compré es una Suzuki Burgman 125. Aquí os la presento ¿Os gusta?
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